viernes, 11 de abril de 2008

Consejo romántico número 101. Hazlo tú, y no esperes...

Esta mañana nuestra querida amiga Rocío de Madrid nos ha dejado un comentario en el consejo número 100 de ayer. Nos contaba que su chico no le compró una flor cuando estaban en un pub y se les acercó una muchacha que las vendía. Asimismo, preguntaba que por qué el Romanticismo no acaba de hacer el efecto que ella desea en su novio.

Apreciada Rocío, es normal que cuando esperas algo de tu pareja y no lo obtienes te sientas defraudada. Sin embargo, y esto va dirigido un poco más a las chicas que a los chicos, el mejor consejo que te puedo dar es que nunca le reproches a tu pareja que no haga lo que te hubiera gustado que hiciera. La mejor estrategia para motivar a tu muchacho para que haga lo que esperas de él es... hazlo tú, y no esperes. Dicho de otra forma, la mejor manera para lograr que un hombre se inspire y le regale flores a su chica es que ella se las regale a él primero. Sencillo, ¿verdad? Pero muy efectivo, créeme.

Ya he recibido varios correos con recomendaciones sobre cómo celebrar nuestro consejo número 100. Espero que sigáis mandándome más sugerencias, y el lunes sin falta decidiremos cómo festejarlo.

Mañana volveré con otro consejo romántico. Mientras tanto... muchas gracias por tu visita.

3 comentarios:

Jenny Cambara dijo...

jejeje nunca le he regalado flores a mi chico pero si eso se necesita para que el se decida a hacerlo... lo intentare!!! gracias por el consejo Manu!! espero con ansias el lunes para festejar lo que tenemos pendiente!! cuidate mucho!!

diclar dijo...

ola Manu¡¡¡¡¡ no veas la pena que me ha dado no haberte podido felicitar ayer, no pude... pero weno aprovecho para felicitarte hoy, MUCHISIMAS FELICIDADES, de todo corazon por hacernos participe de este rinconcito que ya se ha convertido en la casa de muchos y muchas lectores/as. gracias por todo y falta decir que cuentas conmigo para celebrar estos 100 maravillosos consejos que me los he leido mil veces. xao y FELICIDADES otra vez.

Anónimo dijo...

Hay que predicar con el ejemplo sí señor... Simple, sencillo... pero a veces en lugar de hacerlo nosotros nos quejamos porque la otra persona no lo hace.
Un abrazo para tod@s, pero ya sabéis, el más fuerte para Manu, jeje.