domingo, 20 de abril de 2008

Consejo romántico número 110. En cualquier lugar vale...

A Miguel le encanta dejarle mensajes de Amor a Mayte por todas partes. Y siempre es capaz de idear un nuevo lugar para dejar una nota amorosa sin que ella lo pueda intuir...

La última travesura de Miguel fue pintar los huevos que había en el frigorífico con un rotulador. Le dibujó corazones en cuyo interior escribió: “Te Amo Infinito”, “Eres lo mejor de mi vida”, “Te echo mucho de menos”, “Te adoro vida mía”...

Imagínate la cara que se le quedó a Mayte cuando por la noche ambos estaban preparando la cena y ella fue a coger unos huevos para preparar una tortilla. Él ya casi ni se acordaba, sin embargo, ese simple gesto de Amor tuvo unas preciosas consecuencias... Lógicamente, cenaron muy tarde esa noche.

Te recuerdo que esta noche a las 23,59 h, vence el plazo para participar en el sorteo de mis libros... Apresúrate.

Gracias y hasta mañana.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cualquier cosita, por insignificante o tonta que parezca puede hacer feliz a la otra persona...
Pero cuidado con la tinta del rotulador! que puede ser tóxica! yo casi prefiero las notitas, en la nevera incluídas...jejeje.
Buenas nochesss!

Anónimo dijo...

Me gusta mucho la idea, yo lo había exo con notitas en elmicroondas o encima del plato donde se tiene que servir... pero esto es guay jejejeje. Saluditos