martes, 8 de julio de 2008

Consejo romántico número 189. ¡Basta ya!

Hola Davinia. Gracias por el correo electrónico que me mandaste esta mañana. Y con tu permiso, te contestaré públicamente a tu consulta. Y como yo no soy nadie para decirte qué debes hacer, permíteme que sí te cuente una historia que en el año 2004 leí en alguna parte, de autora (o autor) anónima (o anónimo). Lógicamente, después de tanto tiempo sólo recuerdo la idea que transmitía. Espero contarla lo más fielmente posible. Y estoy seguro de que te servirá...

Hace un mes, tal día como hoy, no era un día especial sino un día cualquiera, y él decidió ir a recogerla al trabajo, con un ramo de flores. La noche anterior discutieron y él le dijo muchas cosas desagradables que la ofendieron sobremanera. Pero ese día, por la tarde, cuando la recogió en su flamante coche con ese precioso ramo de flores, ella creyó que él estaba arrepentido, y lo que la noche anterior le dijo no le salió del corazón, porque esta tarde le está regalando flores.

Un día de hace tres semanas, que era un día cualquiera, él decidió mandarle al trabajo un bonito ramo de flores. El día anterior, por la noche, él la zarandeó y la empujó contra la pared, y cuando ella estaba inmóvil, él la cogió por el cuello y la apretó fuertemente durante un buen rato. Ella no dejaba de llorar, temblando aterrorizada. Afortunadamente, no pasó de ahí. Y al día siguiente por la mañana ella se despertó toda magullada y dolorida por todas partes. Pero ella creía que él estaba arrepentido porque al medio día él le envió al trabajo un hermoso ramo de flores.

Hace dos semanas, siendo un día cualquiera, como cualquier otro día de la semana, él llegó a casa para almorzar, y le trajo un ramo de flores. La noche anterior discutieron, y él le pegó un puñetazo en su ojo izquierdo y la amenazó de muerte. Al día siguiente por la mañana ella lo pasó muy mal mientras se maquillaba, porque la cara la tenía hinchada y dolorida. Ni siquiera el abundante maquillaje pudo ocultar el corte que tenía en su ceja y el derrame de su ojo. Al final, ella decidió no ir a trabajar, para que nadie se diera cuenta de nada. Pero ella creía que él estaba arrepentido porque cuando él llegó al medió día para comer le trajo un gran ramo de flores.

La semana pasada, un día cualquiera, nada especial, por la noche él le volvió a pegar. Pero esta vez fue de forma más agresiva aún. La pobre piensa que no puede dejarlo, porque teme que no pueda sacar adelante a sus tres hijos. Ella le tiene pánico, pero supone que depende de él. Por eso, no quiere dejarlo. Además, ella cree que él está arrepentido, porque otra vez le ha regalado flores...

Hoy no es un día cualquiera. Hoy es un día muy especial. Hoy es el día de su funeral. Anoche, ese hijo de perra por fin se salió con la suya... Ha logrado matarla. La golpeó sin cesar. Si ella hubiera tenido la fuerza para dejarle y el valor para denunciarlo hoy no hubiera recibido tantas flores...

¡Basta ya de violencia machista!

Hasta mañana. Gracias.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola!

Jolin Manu es una historia muy fuerte pero aun en la epoca que estamos siguen habiendo mujeres que aguantan a su maltratador ,por miedo ,por sus hijos,o simplemente por el que diran, pero ahi que demostrarle a esas mujeres que no estan solas, aunque si es verdad que el gobierno no hace nada, porque tiene que haber un parte medico o varias denuncias, y lo maximo que hacen es una orden de alejamiento que eso para un maltratador es ``nada´´. En mi trabajo tengo una compañera que tiene un hijo de 4añitos y ella tiene 32 y ya ha pasado por todo esto y ahora tiene una orden de alejamiento pero aun no puede pasear tranquila por la calle ni siquiera en el propio trabajo que ya ha ido varias veces.

NO PERMITAMOS MAS VIOLENCIA.
Mercedes.

Anónimo dijo...

Mujeres!!! no permitan que por nada ese hombre les vuelva a golpear... denunciénlos... si se va ustedes y sus hijos van a estar mejor, así les toque trabajar más o luchar más... si se queda que sea sólo por que nunca las va volver a golpear... recuerden en ese momento ese hombre no las está amando las está viendo como una cosa o una esclava... y tu sabes muy bien TODO lo que vales...

cielo dijo...

Hola,

Estaba yo esperando una noche más poder leer un bonito consejo, cuando me encuentro esta dura historia, fiel reflejo de la realidad de muchas mujeres...
Yo pensaba que los consejos de Manu siempre iban a ser preciosas muestras de romanticismo; pero que duda cabe que antes que el Amor, la vida es lo más preciado que tenemos. Así que, debemos luchar por tener la vida que nos merecemos y no la que otros quieren hacernos vivir.
Todas las mujeres se merecen que las amen.

A quien sufra la violencia de género, todo mi apoyo. Tened fuerza para denunciar y alejar a la persona que os hace daño. Vosotras no estáis solas. Esos hijos de p..., sí.

Un abrazo,
Cielo

Anónimo dijo...

Realista y comprometido, no solo eres romántico.
Eso es bueno, hay gente que cree que la sensibilidad y el romanticismo no van unidos al coraje, al carácter, a la furia, al genio, a la fuerza cuando sea preciso. No quisiera haber estado delante tuya cuando estabas escribiendo esta historia, ya que a poco que te conozco, creo que sería de las pocas veces que hicieras uso de esos músculos que vas cuidando día a día.
En fin, seguramente y desgraciadamente, lo que aquí se escriba tan solo llegará a la vista de las maltratadas, ellos no creo que jamás entren aquí.
Si hubiera alguno, sería señal que quiere rectificar, y tan solo hay una rectificación posible, prometerse a sí mismo, y por supuesto cumplirlo, que la próxima vez que se le pase por la cabeza agredirla, verbal o físicamente, en ese mismo instante coger la puerta y desaparecer de su vida.
A las mujeres, tan solo recordarles a muchas que aún no han sufrido maltrato, que no duden nunca, que si un hombre nos las respeta como personas, jamás, jamás, jamás van a estar enamorados de ella, aunque es verdad muchos si las quieren, y muchísimo,” Para que sean sus sirvientes y no tener que pagar para que le pongan la comida y le tengan la cama caliente”.
H .M .A